¿Qué pasó?
La Fiscalía Nacional de Chile destituyó a Rodrigo Durán, exfiscal adjunto de Los Ángeles, después de que un sumario administrativo probara que traspasó información confidencial a su esposa, Andrea Romero, socia de un bufete que defiende a narcos en la región del Bío Bío.
El modus operandi: cómo operaba la red
Durán intervino en al menos dos causas para filtrar datos a las abogadas del estudio de su esposa. Uno de los casos clave fue el del sicario venezolano Moisés Bastardo, integrante de la banda “Los Corbata”.
El caso Moisés Bastardo
- Las abogadas Andrea Romero y Susana Cortés (socias del bufete) representaban a Bastardo.
- Durán accedió a agendar declaraciones de imputados para facilitar una “colaboración eficaz” y reducir posibles penas.
- Chats de Instagram revelaron que Bastardo le envió a Romero detalles falsos sobre proveedores de armas para que su coimputado repitiera la misma historia en fiscalía.
Interceptaciones y coordinación de testimonios falsos
Según BBCL Investiga, Bastardo –desde la prisión– usó Instagram para coordinar relatos falsos con Romero. Le pidió que su coimputado mencionara a dos supuestos traficantes de armas de Peñalolén y Los Ángeles que enviaban repuestos falsos por Starken.
¿Por qué fue destituido Durán?
El fiscal nacional Ángel Valencia aplicó la destitución (aunque la defensa de Durán presentó un recurso de reposición). La Fiscalía del Bío Bío solo recomendaba suspensión temporal, pero Valencia endureció la sanción por la gravedad de los hechos.
Contexto legal: ¿Qué implica esto?
Hoffmann, Anderson & Halpern explica que la filtración de información fiscal a defensas penales constituye obstrucción a la justicia y ética profesional gravemente vulnerada. Además, Durán enfrenta una investigación penal en Ñuble por otros cargos.
Glosario KULTO
- Colaboración eficaz: Acuerdo entre fiscalía e imputados para reducir penas a cambio de información.
- Sumario administrativo: Investigación interna para sancionar a funcionarios públicos.
Conclusión: ¿Qué sigue?
El caso expone redes de corrupción dentro del sistema judicial chileno. Mientras el recurso de Durán se resuelve, la Fiscalía Nacional envía un mensaje claro: zero tolerancia a filtraciones.
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